Pizzería Carlos es una franquicia de éxito, tal y como demuestran sus números. En el último año han elaborado 36 millones de pizzas en los 71 establecimientos con los que cuenta hasta ahora la cadena. Y es “hasta ahora” porque la cadena prevé abrir 40 establecimientos más en España en 2022.
La historia de Pizzería Carlos se remonta a 2009, cuando dos emprendedores, con experiencia en el sector pizzero, deciden crear su propia marca. Querían ofrecer al público una pizza tradicional, con el sabor original. El primer establecimiento fue todo un éxito, y al segundo año comenzaron la expansión en franquicia. La cadena se ha ido haciendo un hueco en el panorama pizzero español, convirtiéndose en una de las más reconocidas por el público, gracias a la calidad de sus pizzas y a su estatus de pizzería de barrio, muy cercana.
Esta cadena se desenvuelve muy bien en las crisis económicas, ya que nació en plena recesión y ha pasado sobresalientemente por la época de la pandemia y el confinamiento. En 2020 consiguieron mejorar los resultados de 2019, gracias a que el 70% de sus ingresos proceden del delivery. En 2021 las restricciones que todavía se mantenían en algunas zonas de España tampoco les afectaron, ni económicamente ni en su crecimiento, ya que consiguieron batir un record de aperturas, 12 en un único año.
Con el territorio español prácticamente cubierto, los responsables de la Central Franquiciadora se han fijado otro destino: comenzar su expansión internacional en América Latina. Y para ello ha buscado un partner con amplia experiencia en el mundo de las franquicias y el retail, LATAM NETWORKS, que lleva más de 15 años sirviendo a franquicias de Europa y del mercado LATAM.
En esta primera fase de implantación, el objetivo es entrar en dos importantes países del contienente como son México y Colombia. Ambos mercados son más que interesantes destinos por su situación estratégica y sus similitudes con el mercado español. Además, cuentan con la ventaja de tener una gran confianza en el sistema de franquicias, con emprendedores acostubrados a este tipo de inversiones.
Ventajas de la franquicia Pizzería Carlos
La enseña ofrece al emprendedor un negocio consolidado, rentable y con un know how completamente manualizado. El saber hacer ha quedado reflejado en los manuales operativos, que permiten al franquiciado y al personal conocer la forma de trabajar, los procedimientos que hay que seguir en cada situación, la trazabilidad del producto, etc.
El periodo de formación inicial, que se realiza en los establecimientos propios de la cadena, se completa después de la apertura en el propio local. Posteriormente, hay cursos de formación periódicos para dar a conocer todas las novedades que se van incorporando, como nuevos platos, procesos, etc.
Pizzerías Carlos no se queda quieta y va innovando continuamente. Un ejemplo es el caso de la introducción de platos vegetarianos, veganos y sin gluten, atendiendo a las diferentes necesidades de los clientes.
Otro de los factores que han logrado que Pizzería Carlos sea una franquicia de éxito es la facilidad en la gestión del los locales. La marca cuenta con un sistema informático propio, con el que se pueden controlar todos los aspectos del negocio, como costes, ventas, pedidos a proveedores, etc. De este modo, el franquiciado puede estar al tanto de todo lo que ocurre sin tener que estar físicamente en el local, conviertiénsose así en una opción ideal para los inversores.
Para esta expansión internacional, Pizzería Carlos seguirá con el mismo enfoque con el que han crecido en España. En una primera fase, alquilarán un obrador para hacer su masa y contarán con una mínima estructura que permita empezar a franquiciar. Y , por supuesto, las pizzas y demás platos se adaptarán al gusto de cada lugar, ya que es necesario darle un toque local para reproducir el éxito de la compañía.
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